El Corralín de Campanal

El Corralín de Campanal, también conocido como Balcón de Peñamayor, es un restaurante encantador que ha transformado una antigua cuadra de piedra y madera en un lugar perfecto para disfrutar de la gastronomía asturiana. Al entrar, te recibe una acogedora zona de chigre, ideal para empezar la experiencia con una botella de sidra, un clásico local que no puedes dejar pasar. Si buscas comida rica y bien preparada, aquí lo encontrarás; el menú del día a 20 euros (perfecto para un domingo) es simplemente delicioso y a un precio increíble.

No solo la comida es un plus, sino que el servicio es excepcional. Te aseguro que la persona que te atiende hará que te sientas como en casa; siempre con una sonrisa y una recomendación deliciosa. Con una puntuación de 4.5 sobre 5 en Restaurant Guru y muchas reseñas destacando la calidad de la comida casera y los postres, El Corralín de Campanal es un sitio que realmente merece tu visita. Si estás en la zona de Campanal, ¡definitivamente debes agregarlo a tu lista!

Dónde se encuentra El Corralín de Campanal

¡Hola! Si estás buscando un lugar para disfrutar de la mejor comida asturiana, no puedes perderte El Corralín de Campanal. Este restaurante se encuentra en 33529 Campanal, Asturias, en plena montaña entre Nava y San Julián. ¡Un sitio con encanto y unas vistas espectaculares! Te recomiendo que reserves con antelación, porque suele llenarse. Así que, si tienes en mente una escapada gastronómica, ¡hazlo!

La decoración de El Corralín es una mezcla de rusticidad y buen gusto que te hace sentir como en casa. Al entrar, te recibe una pequeña barra, y en la primera planta encontrarás un comedor con 5 o 6 mesas, bien espaciadas entre sí, lo que le da un aire acogedor. Las velas en la pared y las monedas de céntimos le dan un toque original. Además, tienes otro comedor en la segunda planta y los aseos están impecables y también con esa decoración rústica que tanto me gusta. ¡Todo un acierto!

Pasando al tema de la comida, ¡vaya experiencia! Fuimos tres personas un domingo y probamos el menú de 20€, que incluye 3 primeros, 3 segundos, postre, pan y bebida. Todo estaba riquísimo, sobre todo la fabada asturiana servida en una cazuela de barro. Perfecto en cuanto a textura y sabor. El pote asturiano también en cazuela de barro, ¡no dejamos ni una gota en el plato! De segundo, las patatas rellenas de picadillo estaban muy bien, aunque un pelín más de picadillo nunca viene mal, ¿verdad? Y el codillo, un espectáculo, se deshacía en la boca. ¿Y de postre? Cuajada con miel, tarta helada y tarta de queso. ¡Todo para chuparse los dedos!

Y un pequeño detalle que a muchos les gusta saber: no hay tele en el restaurante, lo que le añade un punto a favor porque puedes disfrutar de una buena conversación y de la comida sin distracciones. Así que, si quieres un lugar donde disfrutar de una excelente comida y un ambiente familiar, El Corralín de Campanal es, sin duda, un lugar que deberías visitar. ¡No te arrepentirás!

Qué tipo de cocina ofrece El Corralín de Campanal

Y si hablamos de El Corralín de Campanal, lo primero que hay que decir es que merece un 10. Te prometo que, si vas, la comida del menú del día te va a sorprender. Imagínate un pote asturiano brutal que es simplemente espectacular, seguido de una chuleta de cerdo que haría llorar a cualquier amante de la buena carne. El trato es increíble, de esos que hacen que te sientas como en casa. Y ni hablar de lo limpio y cuidado que está el lugar, ¡realmente tiene su encanto rural! Es el tipo de sitio al que vuelves sin dudarlo.

Claro que, si eres turista, hay que tener en cuenta que la carretera para llegar puede ser un poco estrecha, pero créeme, valdrá la pena. Si buscas comida casera y a buen precio, este es tu sitio. Y para que lo sepas, el precio por persona ronda entre los 10 y 20 euros, dependiendo de lo que elijas de su fabulosa carta.

La experiencia es estupenda, con platillos tradicionales como la fabada, el pitu caleya y las cebollas rellenas que están de rechupete. El servicio es súper educado y eficiente, lo que hace que la experiencia sea aún más agradable. Eso sí, maybe el postre podría ser un poco flojo, pero al final, ¿qué importa eso cuando estás disfrutando de un cafetito comprando calorías de felicidad?

En resumen, la cocina de El Corralín de Campanal es pura tradición asturiana, con platos caseros que son una delicia. Aquí puedes disfrutar de especialidades como el pote asturiano, la fabada, y deliciosos rellenos de cebolla. Así que, ¿te animas a probar? Realmente, no hay un sitio casero igual. ¡No te lo pierdas!

Qué era originalmente el edificio donde se ubica El Corralín de Campanal

La verdad es que El Corralín de Campanal me sorprendió bastante. Es un restaurante muy bonito y cuidado que se encuentra en un pueblo aislado de Asturias, así que ya sabes, la carretera para llegar es estrechita, típica de esta zona, pero vale la pena el viaje. Una vez que llegas, te encuentras con un ambiente acogedor que te invita a quedarte. La comida es, sin duda, lo que más destaca. Comida tradicional asturiana, hecha de manera clásica y con ingredientes de calidad, como se debe hacer. Yo probé el pote que era una ración generosa servida en cazuela de barro y, aunque un poco incómoda, ¡estaba riquísimo! Esa morcilla... espectacular, de verdad.

Ahora, no todo fue perfecto. El servicio dejó un poco que desear. Ya sabes, a veces en los restaurantes pasa que parece que los camareros se han tomado un café de más y van a su aire. A pesar de tener la mesa lista, tuvimos que esperar un buen rato. Si hubieran ofrecido un pincho de cortesía mientras esperábamos, se habría amenizado un poco la espera, porque, te soy sincero, llegamos con muuucha hambre. Así que si decides ir, ve con calma y con el estómago un poquito menos vacío, porque parece que la espera puede hacerte sentir como si estuvieras haciendo un maratón.

Y ya que estamos hablando de la experiencia, el menú de fin de semana por 20 euros es una buena opción si quieres probar platos típicos asturianos. Yo no me pude resistir al pitu caleya, aunque hay que admitir que estaba un pelín seco. Las patatas, en cambio, estaban excelentes, bien tostaditas. Como postre, un arroz con leche que, la verdad, no cumplió mis expectativas. Me imaginaba un sabor más auténtico, de esos que te transportan a la casa de la abuela, pero no fue el caso. En fin, la experiencia general fue buena, pero aún así espero que afinen un poco ese servicio para que todo fluya mejor.

Por cierto, si te preguntas qué era originalmente el edificio donde se ubica El Corralín, te cuento que, al parecer, era un chigre clásico que han ido modernizando con el tiempo gracias a su éxito. ¡Así que no dudes en ir, porque el buen comer siempre es un buen plan! Eso sí, asegúrate de aparcar por el pueblo, que si bien es un poco complicado encontrar un buen sitio, hay varias opciones gratuitas.

Cuál es la especialidad del restaurante que los visitantes no deben perderse

Bueno, si buscas un lugar donde comer bien, El Corralín de Campanal es un sitio que no puedes dejar pasar. La ubicación es excepcional; aunque se llega tras subir por una pista un poco estrecha y empinada, el camino vale mucho la pena. Cuando llegas, te encuentras con un local encantador, una antigua cuadra restaurada con mucho gusto. Todo está súper acogedor y limpio, y cada visita te hace sentir como si fueras de la casa. El trato del personal es excelente, siempre con una sonrisa y dispuestos a hacerte sentir cómodo.

Hemos ido varias veces y puedo decir que cada día ha sido buenísimo. El servicio es bastante bueno y, a pesar de ser un lugar algo remoto, la comida es de primera calidad. En nuestra última visita, nos decantamos por el menú del día, ¡y no decepcionó! Las raciones son generosas y el sabor es espectacular, sobre todo si decides probar la fabada asturiana que me han recomendado y que, de hecho, fue una de las cosas que más disfruté. Todo esto por un precio muy razonable, entre 10 y 20 euros por persona, y eso es una auténtica ganga para lo que ofrecen.

Otra cosa que me encantó fue la decoración rústica que le da un aire hogareño y acogedor al lugar. Además, si estás de aventuras y te gusta el senderismo, hay una senda bastante chula para caminar hasta aquí desde Piloñeta. Pero eso sí, ¡prepárate para las cuestas! Ahora, si vas a ir, no puedes dejar de probar su tarta de queso que, según los comentarios, parece ser una de las especialidades que los visitantes no deben perderse. ¡Yo definitivamente volveré por ella!

Qué me recomiendan beber al llegar al restaurante

¡Ya te digo que El Corralín de Campanal es un sitio que no te puedes perder si estás en Asturias! El ambiente es impresionante, como si estuvieras en un rincón escondido del mundo, pero a la vez muy acogedor. La primera vez que fui, me quedé alucinado con la atención; tanto los dueños como los camareros son encantadores y súper profesionales. La comida casera que ofrecen es simplemente espectacular. Te arriesgas a sentir que estás comiendo en casa de tu abuela, pero en un entorno elegante.

Si decides ir con un grupo de amigos, como nosotros hicimos, la fabada asturiana es un must. La probamos y, la verdad, está recomendadísima. También puedes darte un capricho con el Pitu caleya o el codillo; este último se deshacía en la boca, ¡una maravilla! Y ni hablar de los tortos y los callos, ¡todo buenísimo! Y no se puede olvidar el café de puchero para rematar la experiencia. Todo esto lo disfrutamos en un ambiente de tranquilidad total, con un servicio de 5 estrellas que te hace sentir como en casa.

Y, si por alguna razón te preguntas a dónde llegar con tu coche, no te preocupes. Hay muchas plazas de aparcamiento gratuitas en la calle. Así que, si te lanzas a probar su maravilloso desayuno, ¡serán solo 25 euros para siete personas! Y sí, la tortilla de patatas es casera y contundente, un verdadero manjar.

Ahora, la pregunta del millón: ¿Qué me recomiendan beber al llegar al restaurante? Yo te diría que empieces con un buen vino de la zona. Tienen una selección que complementa genial la comida asturiana, y un par de cañas para ir abriendo el apetito nunca están de más. ¡Así que ya sabes, prepárate para una experiencia deliciosa que recordarás!

Cuál es el precio del menú del día en El Corralín de Campanal

Y hablando de este sitio, El Corralín de Campanal es toda una joyita en medio del campo. Imagínate sentado en una colina, disfrutando de buenas vistas y un ambiente elegante y confortable. La verdad es que la atención que recibimos fue exquisita, el personal realmente se preocupa por hacerte sentir como en casa. Todo lo que probamos estaba riquísimo y, sinceramente, no creo que una comida de calidad tenga que romper el banco. Nos salimos con un precio promedio de 10-20 € por persona, lo que es bastante justo considerando lo bien que comimos.

Recuerdo que fuimos un buen grupo, 8 adultos y 5 niños, así que te imaginas la que montamos. Para calmar un poco la sed nos lanzamos a unas cervezas bien frías en los bancos exteriores mientras montaban la mesa. La comida... ¡vaya experiencia! De entrada, nos dejaron caer la fabada y el pote asturiano que eran exquisitos. Ya de segundo, ¿qué decirte del pitu caleya, codillo y cebollas rellenas de bonito? La cocina tradicional se nota que la hacen con cariño, como debe ser. Y el servicio, ¿cn la amabilidad de 10? Totalmente atentos desde que llegamos hasta que nos despedimos.

Lo que más me choca es que este lugar es un poco remoto, así que si alguna vez sientes la necesidad de escapar de la ciudad, este es el sitio al que debes ir. Platos recomendados a la carrera: la fabada, el pitu caleya, el flan de manzana—una delicia que te transporta a otra galaxia. Y si te preocupa lo del aparcamiento, no te agobies, hay opciones a pie de calle, y en un pueblo pequeño como Campanal hay espacio suficiente.

Y si te estás preguntando sobre el menú del día, puedes esperarte a pagar entre 10 y 30 € por persona, dependiendo de lo que elijas. Y créeme, cada céntimo vale la pena por lo que vas a disfrutar. Así que, si pasas por Asturias, ¡hazte un favor y no te lo pierdas!

Cómo es el servicio en El Corralín de Campanal

Y, bueno, si estás pensando en hacer una escapada a El Corralín de Campanal, ¡prepárate para disfrutar! Este sitio tiene cinco estrellas por una razón. Es un lugar con un encanto especial y muy acogedor, rodeado de un entorno natural que quita el aliento. ¿La comida? ¡Súper buena! La materia prima es de alta calidad y se nota en cada bocado. Además, la atmósfera es ideal para disfrutar de un buen rato con amigos o familia.

Lo mejor de todo es que el menú del día es casero y está a un precio increíble, entre 10 y 20 euros, así que no tienes excusas para no ir. Y si tienes un poco de hambre, ¡estás en el lugar correcto! Las porciones son abundantes y saben a gloria, desde las cebolas rellenas hasta los cachopos. Las vistas son otro punto fuerte; te sentirás como si estuvieras en un lugar idílico de Asturias, perfecto para sacar unas cuantas fotos.

Ahora, no todo ha sido positivo, porque hay quienes han tenido experiencias bastante negativas. Algunas reseñas mencionan que el trato que reciben puede ser un poco frío, tanto de parte de la madre como del hijo. Vamos, que hay gente que se ha sentido casi como si estuvieran molestando al personal solo por querer comer. A pesar de que el local tiene un ambiente bonito, esos detalles pueden dejar un mal sabor de boca. Así que, aunque las vistas y la comida suelen recibir el aplauso, el servicio puede ser un área donde aún hay espacio para mejorar.

En resumen, el servicio en El Corralín de Campanal puede ser un poco dispar, ya que hay quienes destacan la amabilidad y la atención, pero otros han tenido la sensación de que no son bien recibidos. Si decides visitar, te recomendaría ir con la mente abierta y disfrutar de la comida y las vistas. ¡Seguro que no te arrepentirás!

Fotografías El Corralín de Campanal