La Cueva de los Franceses es un auténtico tesoro escondido en la Montaña Palentina, cerca de Revilla de Pomar. Acceder a esta maravilla natural es toda una aventura, ya que lo hacemos a través de un túnel artificial que ha sido cuidadosamente excavado en la piedra caliza. Una vez dentro, te espera un fascinante viaje subterráneo donde podrás admirar impresionantes estalactitas y estalagmitas mientras recorres un trayecto de unos 500 metros. La visita, guiada y muy didáctica, es ideal para ir con los peques; ¡hay mucho que descubrir!
Antes de entrar a la cueva, es esencial pasar por el Centro de Visitantes, donde comienza la experiencia. Aquí, un guía te contará la historia de los soldados galos y cómo este lugar sirvió de enterramiento durante la Guerra de la Independencia. La entrada es muy asequible, con precios de 3 euros para adultos y gratis para los más pequeños. ¡Así que no olvides reservar! Explorar la Cueva de los Franceses no solo es emocionante, sino que también forma parte del impresionante Geoparque Mundial Unesco Las Loras. ¡Te va a encantar!
Cueva de los Franceses
Mapa Ubicación Cueva de los Franceses
Dónde se encuentra la Cueva de los Franceses
¡Hola, aventureros! Si alguna vez se encuentran cerca de Revilla de Pomar en Palencia, no pueden dejar pasar la oportunidad de visitar la Cueva de los Franceses. Estaba en la zona sin planearlo, y aunque no estaba abierta al público, el simple hecho de ver la entrada y las instalaciones te dejan con ganas de más. Prometo que en cuanto abran, ¡ahí estaré! De hecho, escuché que le hicieron un homenaje a Rafa Nadal por ahí, y ahora tienen al de las fresas incordiando. ¡Qué cosas, eh!
La cueva está ubicada en el Geoparque Las Loras, y la experiencia de recorrer sus 500 metros de longitud es simplemente increíble. Con una visita que usualmente dura alrededor de 45 minutos, es apta para todas las edades, así que los peques también pueden disfrutarla. Y no te preocupes, porque el recorrido es bien sencillo y está iluminado para que no te dejes nada en el camino... al menos, lo que se puede ver, porque no está permitido hacer fotos dentro. Ah, y un consejo: reserva tus entradas con antelación por teléfono, especialmente si vas en grupo, ¡no querrás quedarte fuera!
¿Y saben qué más? ¡La guía de nuestra visita fue Sandra, y fue un verdadero encanto! Hizo el recorrido tan ameno y divertido, transmitiendo toda la historia de la cueva de una manera súper cercana. Por cierto, si quieren un plan extra para ese día, no dejen de visitar el Mirador de Valcavado, que está muy cerquita (solo a 1.6 km). Las vistas son de otra galaxia, ¡se los prometo!
En resumen, la Cueva de los Franceses se encuentra en Revilla de Pomar, Palencia. Es un lugar que no solo promete aventuras subterráneas, sino también unas vistas espectaculares en sus alrededores. Así que, ¿qué esperan? ¡Planifiquen esa visita y prepárense para maravillarse! ️✨
Cuál es la principal característica geológica de la cueva
Vaya, la visita a la Cueva de los Franceses ha sido realmente una experiencia inolvidable, ¿verdad? Desde que entramos, la impresionante erosión del agua te deja sin aliento. Las figuras y relieves que la naturaleza ha esculpido son, de verdad, espectaculares. Y lo mejor es que el guía nos mantuvo enganchados con sus explicaciones, haciéndonos sentir que estábamos descubriendo un tesoro oculto en pleno corazón de la tierra. ¡El tiempo se pasó volando!
Además, el Centro de Visitantes es bastante práctico. Tienen un parking enorme y accesible, aunque, lamentablemente, hay que decir que la cueva en sí no es muy amigable para quienes tienen movilidad reducida. Pero bueno, si llevas a tu peludo contigo, no te preocupes: ¡puedes llevar tu mascota! Ellas se ocupan de cuidarla mientras tú disfrutas de la visita, eso sí, asegúrate de que esté bien educada. Es todo un win-win.
Ya que estábamos en el tema, la visibilidad dentro de la cueva es impresionante. Me encantó la parte al final, donde se proyecta un video en la pared que muestra cómo el agua ha ido dando forma a este lugar a lo largo de los años. De verdad que merece la pena quedarse a verlo. Aunque el recorrido está lleno de escaleras, no se hace pesado gracias a las explicaciones que nos daban. Es cierto que puede hacerse un poco largo para los más pequeños, pero ¡todas esas paradas son para aprender!
Y si te preguntas cuál es la principal característica geológica de la Cueva, ahí tienes una joya: todo gira en torno a la erosión de agua, que ha creado estas formaciones tan únicas a lo largo del tiempo. Es impresionante saber lo que tenemos en España, que a veces no le damos el valor que merece. Así que, si estás cerca, no dudes en pasar por allí, ¡te va a encantar!
Cómo se accede a la Cueva de los Franceses
Y bueno, después de haber dejado atrás el bullicio de la ciudad, llegamos a la Cueva de los Franceses, que es realmente una maravilla. La visita fue más que genial, ¡merece todas las 5 estrellas que pueda ofrecer! La guía, Marian, hizo un trabajo excelente explicando cada detalle de la cueva de manera tan clara que hasta los que no tenemos ni idea de geología pudimos entender todo. La naturaleza allí es impresionante; ¡es increíble cómo el agua ha ido esculpiendo las formaciones a lo largo de millones de años! Si te gusta la naturaleza, esto te va a dejar sin palabras.
Ahora, antes de ir, asegúrate de hacer la reserva de tu entrada porque no hay más que un número limitado de personas para cada grupo. Nosotros tuvimos suerte y entramos justo a tiempo, pero hay que organizarse. La visita dura alrededor de unos 50 minutos y recorrimos 500 metros de pura magia. Eso sí, no olvides llevar un abrigo, porque dentro hace un frío de 8-10 grados, ¡y más si vas con niños! Pero la experiencia vale 100% la pena por solo 3 € por adulto.
Una cosa que nos dejó un poco decepcionados fue que no dejan hacer fotos dentro de la cueva. Con lo bonita que es, hubiese sido un recuerdo increíble, incluso sin flash, como en otras cuevas. Pero bueno, hay que aceptar que así se preserva el lugar. Aunque la visita estuvo alucinante, quizás se podría mejorar el tema del aforo, ya que 30 personas en un grupo es un poco excesivo, incluso sin la preocupación del Covid. Pero, en fin, ¡toda la experiencia fue espectacular!
Ah, y si quieres alargar la aventura después de la cueva, te va a encantar el mirador que está a un kilometro de distancia. Las vistas son majestuosas; se pueden ver las provincias de Palencia, Burgos y la Comunidad de Cantabria de una manera que quita el aliento. Si tienes tiempo, también puedes acercarte a la cascada de Covalagua, que aunque ahora está seca, debes imaginarte cómo debe ser cuando cae el agua. Desde el aparcamiento hay un caminito de unos 900 metros y en el lugar hay mesas de piedra y bancos para hacer una parada y disfrutar de algo de comida. ¡Perfecto para un día de exploración!
Ahora, para acceder a la Cueva de los Franceses, solo necesitas tomar la carretera que lleva a Revilla de Pomar y seguir las señalizaciones. No te olvides de hacer la reserva antes de ir, que es la clave para evitarte sorpresas. ¡Ya verás que te va a encantar!
Qué tipo de formaciones se pueden observar dentro de la cueva
Y bueno, si estás buscando una experiencia única, la Cueva de los Franceses es una apuesta segura. La visita guiada dura unos 50 minutos y es ideal para todos, ya que el recorrido es accesible y fácil de seguir. No olvides hacer tu reserva previa, porque se llena rápido. Puedes disfrutar de un agradable paseo de aproximadamente 500 metros iluminados, rodeado de las formaciones espectaculares que hacen que el lugar sea tan especial. Al final, te espera un pequeño cine natural con una proyección en una pared de roca que no te puedes perder. ¡Es como estar en otra dimensión!
Además, el guía que te acompaña lo hace todo mucho más ameno. Tiene una forma de contar la historia y las curiosidades de la cueva que te engancha. La atmósfera es un poco fresca y bastante húmeda, así que, sinceramente, te vas a agradecer llevar una chaqueta. El suelo es antideslizante, así que no tienes que preocuparte por eso mientras admiras la belleza del lugar. Pero recuerda, aunque no se pueden sacar fotos por dentro, cada rincón de la cueva es digno de disfrutar en persona.
Y para los que disfrutan del aire libre, después de la visita, apúntate a dar una vuelta por los alrededores. Hay un mirador cercano que ofrece unas vistas increíbles. Es un lugar donde la naturaleza te abraza y te invita a quedarte un ratito más. Así que, si estás en la zona, no hay duda: tienes que visitar la cueva. ¡Te aseguro que lo vas a disfrutar!
Dentro de la cueva, puedes observar formaciones kársticas impresionantes, como estalactitas y estalagmitas que parecen sacadas de una película. La mezcla de formas y colores es realmente asombrosa y no hay palabras que lo puedan describir completamente. Es un espectáculo natural que refleja la increíble belleza del mundo subterráneo, ¡definitivamente un verdadero regalo de la naturaleza!
Cuánto tiempo dura el recorrido subterráneo en la cueva
Si te animas a visitar la Cueva de los Franceses, te prometo que no te vas a arrepentir. La última vez que estuve allí fue el 16 de junio y, aunque éramos solo cuatro almas más la guía, la experiencia fue simplemente genial. Te recomiendo que reserves tu cita con antelación, porque parece que es uno de esos lugares que atrae a gente curiosa, y no querrás quedarte sin tu turno. Lo mejor de todo es que la cueva está muy bien conservada y las reformas han hecho que la visita sea cómoda para todos. Realmente, es una joya escondida que vale la pena descubrir.
Las guías que nos atendieron fueron un 10 en amabilidad y conocimiento. Sobre todo, la que nos acompañó adentro; no recuerdo su nombre, pero se notaba que disfrutaba compartir lo que sabía con nosotros, lo cual hizo que el recorrido fuera aún más interesante. Sus explicaciones sobre las formaciones calcáreas fueron claras y entretenidas, y además se mostró súper abierta a nuestras preguntas y comentarios. Eso sí, si no has escuchado nunca sobre un polje, ahora es el mejor momento para hacerlo, y te aseguro que acabarás buscando más sobre ellos.
Y si decides pasarte por la cueva, no olvides que en la zona hay muchas otras cosas por hacer. Puedes darte una vuelta por el Mirador de Valcavado y quedarte boquiabierto con las vistas, o si te apetece un poco de aventura, lánzate a caminar por las balconadas de Las Loras. Si piensas que el tiempo que se requiere es poco, es que no has estado bien preparado para el frío que puede hacer. Hablando de eso, una idea que me parece fantástica es que en el Centro de Visitantes de la cueva deberían tener un pequeño stand que venda forros polares o chubasqueros con su logotipo. ¡Te aseguro que muchos nos los llevaríamos! Al menos yo hubiera comprado uno, y más cuando el clima no es precisamente cálido.
En cuanto al recorrido en sí, puedes contar con que dura aproximadamente 40 minutos. Es un tiempo ideal para explorar y disfrutar sin prisas, así que prepárate para dejarte sorprender por la belleza del subsuelo. Creeme, la Cueva de los Franceses no es solo una parada más, ¡es una experiencia que debes vivir!
Es posible visitar la cueva con niños
Y bueno, ya que hablamos de la Cueva de los Franceses, déjame contarte lo que me pareció realmente impresionante. La entrada, aunque un poquito artificial y fuera de lugar, te lleva a un lugar que de inmediato te sorprende. En su interior, la cueva es un espectáculo puro. Hicimos un recorrido de unos 500 metros que nos dejó boquiabiertos. Y la info que nos dio el guía... ¡un auténtico crack! Sus explicaciones eran sencillas y súper didácticas, lo que hizo que todo fuera muy ameno. Si estás pensando en ir, no dudes en dar el paso, especialmente por solo tres euros para los adultos y dos con el crío.
Como te dije, la temperatura dentro de la cueva es de unos fresquitos 10°, así que recuerda llevarte una chaqueta o un jersey. Aunque, si le preguntas a cualquiera que haya estado, te dirá que puedes ir en pantalones cortos tranquilamente. Lo mejor es que la cueva está bien adaptada, así que podrías ir incluso con chanclas de atar y estar cómodo. Eso sí, lo ideal es que evites las mochilas para moverte con más libertad.
Después de salir, no te olvides de subir al mirador que está al lado. La vista es absolutamente impresionante y te lleva a un estado de relax total. Es un lugar perfecto para reflexionar y tomar algunas fotos. No te preocupes por la espera, ya que no tuvimos que hacer fila y, de todos modos, es recomendable reservar si vas un fin de semana, porque parece que la gente lo tiene como una de las visitas esenciales.
Y para aquellos que se lo están preguntando, sí, ¡es totalmente posible visitar la cueva con niños! La guía es tan entusiasta que logra captar la atención de los más pequeños, y el ambiente es muy seguro. Así que si tienes en mente hacer una excursión familiar, solo asegúrate de llevar algo de abrigo y disfrutar de este rincón lleno de historia y maravillas naturales. Te prometo que no te vas a arrepentir.
Qué se ofrece en el Centro de Visitantes antes de entrar a la cueva
Y bueno, si estás pensando en hacer una escapada, la Cueva de los Franceses en Revilla de Pomar es un planazo total. La verdad es que es una cueva muy interesante, y te lo dice alguien que casi siempre se aburre en sitios así. La guía que nos tocó fue una crack, super buena explicando todo y teniendo la paciencia de contestar a todas las dudas que le lanzamos. No sé, me parece que hace la diferencia cuando alguien le pone tanto cariño a lo que hace, ¿no crees?
Lo que más me impresionó de la cueva fue la zona de las loras. Si te gusta la naturaleza y los paisajes, vas a flipar. No olvides llevar tu cámara, porque las fotos que puedes sacar son de esas que quitan el aliento. Y lo mejor es que fuimos un fin de semana y no tuvimos tiempo de espera. Eso sí, es recomendable reservar con antelación, porque ya sabes cómo se pone todo en temporada alta y no querrás quedarte fuera.
En cuanto al Centro de Visitantes, antes de que entres a la cueva, te ofrecen varias cosas interesantes. Hay exposiciones que destacan la historia y la geología de la zona, así como información sobre la fauna y flora que te puedes encontrar. Es una manera genial de meterte en el ambiente antes de aventurarte en la cueva. Además, ¡siempre es bueno saber lo que estás viendo! Y sí, es un sitio que merece la pena visitar antes de tu excursión. Así que ya sabes, ¡a ponerlo en tu lista!
